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La próxima semana es el Día de Acción de Gracias, lo que marca el inicio de la temporada festiva. Muchos de ustedes viajarán para visitar a familiares y amigos en esta época del año. Alojarse con seres queridos puede ser una experiencia maravillosa, y a todos nos encanta el alojamiento gratuito. Pero siempre debes recordar que la hospitalidad es un regalo, uno que debe aceptarse con gratitud. Aquí te explicamos cómo mostrar tu agradecimiento y hacer que tu estancia sea bienvenida y agradable en esta temporada festiva, o en cualquier época del año.
- Envía dinero para los alimentos. Si tu anfitrión se encargará de los gastos de comida durante tu estadía, envía un cheque antes de tu visita para cubrir el costo de los alimentos y otros incidentales asociados con hospedarte. Si esperas para ofrecer dinero hasta que estés allí, tu anfitrión inevitablemente rechazará la oferta por cortesía. Así que simplemente envía el cheque antes de tu viaje con una nota sobre lo emocionado que estás por la visita. Si tu visita será corta, invita a tu anfitrión a cenar fuera y paga la comida.
- Llega a tiempo. Si le dices a tu anfitrión que llegarás el miércoles por la mañana, llega a esa hora. Si te retrasas, asegúrate de llamar antes y actualizar a tu anfitrión sobre cuándo llegarás.
- Lleva un regalo. Para mostrar tu agradecimiento por el alojamiento gratuito, lleva un regalo. No tiene que ser grande o caro. Dulces, flores, botellas de vino o regalos únicos de tu estado natal siempre son bien recibidos.
- Mantén tu área ordenada. Antes de salir cada día, asegúrate de hacer la cama y arreglar tu habitación. Coloca los platos en el lavavajillas después de usarlos.
- Colabora con las tareas del hogar. Siempre está dispuesto a ayudar en casa. Ayuda a preparar las comidas, lava los platos y saca la basura. Un anfitrión amable nunca te pedirá directamente que ayudes, así que simplemente ponte manos a la obra.
- Interfiere lo menos posible con la rutina de tu amigo. Tu amigo puede querer pasar tiempo contigo, pero nunca deberías imponer tu presencia en su tiempo. Haz lo posible por adaptar tu rutina a la de la casa para no causar molestias.
- Comunica tu horario. Informa a tu anfitrión de tu horario cada día y haz todo lo posible por cumplirlo. Esto ayudará a tu anfitrión a planificar las comidas y saber hasta qué hora debe quedarse despierto.
- No ignores a tu amigo por completo. Si tu amigo vive en una ciudad turística y el propósito de tu viaje es tanto visitarlo como hacer turismo, no ignores por completo la visita. A nadie le gusta sentir que solo lo usas como un hostal. Haz turismo cuando tu amigo esté trabajando, planea actividades juntos cuando no lo esté, e invita a tu anfitrión a tus excursiones.
- Llega con algunas ideas sobre lo que quieres hacer y ver. Aunque tu amigo seguramente tendrá cosas que deseará hacer contigo, no deberías esperar que te entretenga todo el día.
- Aunque no disfrutes de todas las actividades planeadas, guarda tu descontento. Parte de visitar a un amigo es acompañarlo en actividades que él disfruta. Si tu amigo se está esforzando por entretenerte, hazle saber que aprecias sus esfuerzos.
- No critiques la ciudad de tu anfitrión. Si, por ejemplo, eres un orgulloso neoyorquino que visita a un primo en Omaha, no compares desfavorablemente su ciudad con Nueva York. La mayoría de las personas están orgullosas de su ciudad natal; sé generoso en tus cumplidos.
- Siempre pide permiso. Recuerda que eres un invitado. Aunque alguien te diga que te sientas como en casa, sigue pidiendo permiso antes de usar cosas. Es solo una cuestión de cortesía.
- No prolongues demasiado tu visita. Trata de que tu estancia no dure más de tres días. Tu anfitrión tiene cosas que hacer y no puede poner su vida en pausa para siempre.
- Desarma la cama antes de irte. Es probable que tu anfitrión lave las sábanas después de tu partida. Ayúdalo quitando las sábanas antes de irte.
- Escribe una nota de agradecimiento. Mostrar verdadera hospitalidad es uno de los mayores gestos de bondad que un amigo puede ofrecer. Asegúrate de expresar tu gratitud enviando una nota de agradecimiento poco después de tu viaje.
