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3 Asesinos del Hombre: Sexo

La mayoría de las personas en puestos de liderazgo tendrán la oportunidad de acostarse con alguien inapropiado. Tendrás la oportunidad de cruzar una línea sexualmente. Te enfrentarás a una situación que parecerá imposible de rechazar. No es cuestión de si ocurrirá, sino de cuándo. Así que, a menos que quieras ser víctima del asesino del “Boom Chicka Wah Wah”, necesitamos estar preparados para tomar buenas decisiones en el área de la sexualidad y las relaciones. – Deadly Viper

Terminamos la serie de “3 Asesinos del Hombre” con el tema del sexo, posiblemente el más común y letal de los tres. No se necesita ser historiador para recordar los nombres de varios hombres prometedores que han sido derribados en su mejor momento por el sexo en sus diversas formas: Elliot Spitzer, exgobernador de Nueva York; John Edwards, candidato presidencial; John Browne, director ejecutivo de BP… oh, y también hubo algo sobre una mujer llamada Lewinsky, ¿verdad?

Estos hombres eran líderes exitosos con futuros prometedores. Sin embargo, eligieron tirarlo todo por la borda por sexo. ¿En qué estaban pensando? ¿Cómo terminaron eligiendo hacer algo que sabían que conllevaba tanto riesgo? ¿Qué tiene el sexo que hace que los hombres vayan más lejos de lo que quieren, se queden más tiempo de lo que desean y paguen más de lo que jamás imaginaron?

En La verdad sobre el engaño, el consejero familiar licenciado M. Gary Neuman estudió a cientos de hombres que habían engañado a sus esposas para descubrir la motivación detrás del acto. Sus resultados fueron bastante interesantes. Cuando se les preguntó qué los llevó a la infidelidad, las respuestas se desglosaron de la siguiente manera:

  • 48% – principalmente insatisfacción emocional
  • 32% – igual insatisfacción emocional y sexual
  • 8% – principalmente insatisfacción sexual

Lo notable de estos hallazgos es el gran número de hombres que engañaron debido a la insatisfacción emocional más que sexual. ¿Insatisfacción emocional? ¿En serio? No lo adivinarías escuchando las conversaciones entre hombres. Imagina decirle a tus amigos durante el medio tiempo de un partido de fútbol que tu esposa no está atendiendo bien tus emociones. Probablemente sería la última vez que te inviten a las festividades del día del partido. Muchos hombres han sido educados para no hablar demasiado de sus sentimientos y no compartirlos con los demás. No se dan cuenta de que hay un problema en esta área hasta que miran atrás y reflexionan sobre lo que salió mal.

Este no es solo un problema de hombres casados. Los mismos problemas de insatisfacción emocional se revelan en la vida de hombres solteros que saltan de una relación a otra, esperando encontrar a una mujer que borre sus dudas y les haga sentir como hombres. La mayoría de nosotros nunca lo admitiríamos, disfrazando convenientemente este vacío emocional bajo términos como “donjuán”, “galán” o “jugando el campo” en lugar de llamarlo por lo que realmente es: inseguridad y debilidad.

Lo curioso del sexo es que nunca se trata solo del sexo. Siempre hay algo más detrás del acto físico. Ya sea soledad, falta de conexión con la pareja, baja autoestima o una necesidad de control, el sexo parece prometer un descanso rápido y placentero de los problemas reales con los que estamos lidiando.

Quizás nuestra incapacidad para reconocer la importancia de la conexión emocional se haya convertido en nuestro talón de Aquiles cuando se trata de mantenernos limpios en el terreno de la sexualidad. O quizás nuestra falta de admitir que, en la era del Botox, los implantes y el blanqueamiento dental, no se trata solo de lo físico.

Los hombres, tanto solteros como casados, tienen un deseo innato de ser útiles, valiosos… y necesarios.

Un vistazo rápido a algunos de los héroes que admiramos muestra ejemplos de hombres que son invaluables para quienes los rodean. Piensa en Russell Crowe en Cinderella Man, saliendo cada noche a pelear para comprarle a su familia algo de leche y mantener la calefacción de su apartamento encendida. La idea de proveer para nuestros seres queridos resuena en todo hombre. Es algo que sentimos que nacimos para hacer de una forma u otra.

Así que tiene sentido que los hombres se sientan atraídos por aquellos que los hacen sentir valiosos y necesarios… y probablemente se desvíen de una relación con aquellos que no lo hacen.

Neuman explica que el sentimiento de ser subestimado es el factor emocional más común entre los hombres infieles. En algún momento, en medio de los cambios de pañales y los pagos de la hipoteca, la gratitud parece desaparecer en los matrimonios. Las parejas que antes escribían poemas sobre la belleza y el valor del otro, de repente ya no pueden reunir la fuerza para decir “gracias”. Y esto golpea a los hombres en lo más profundo.

Esto también podría explicar por qué tantos hombres terminan teniendo relaciones con sus subordinadas en el trabajo. Neuman descubrió que “…casi la mitad de los hombres infieles informaron que conocieron a sus amantes en el trabajo”. La joven secretaria que te llama “señor” y deja todo para atenderte se vuelve bastante atractiva cuando vienes de un ambiente hogareño donde una mirada de desdén se ha convertido en el saludo habitual.

“Los hombres parecen fuertes, poderosos y capaces. Pero por dentro, son inseguros como todos los demás. Buscan a alguien que los eleve y los haga sentir valorados”, explica Neuman.

Obviamente, no puedes hacer que te sientas valorado y necesitado por ti mismo; ese tipo de retroalimentación debe provenir de la mujer en tu vida. Esto significa que las mujeres tienen un gran papel en la protección de la fidelidad de una relación. Pero no todo recae sobre ella. Aunque no puedes obligar a tu esposa o novia a tratarte con gratitud, hay pasos que puedes tomar para generar más sentimientos amorosos entre ambos. Trata a tu esposa con la misma apreciación que deseas sentir a cambio. Haz lo que te pide rápidamente y sin la menor queja. Ve más allá de lo esperado en las tareas del hogar y en gestos románticos. Y dile explícitamente a tu esposa cómo te sientes y qué necesitas emocionalmente de ella. A los hombres no les gusta hablar de sus necesidades emocionales, pero es mucho mejor forzarse a hacerlo ahora que señalarla con el dedo después de haber sido infiel.

Si bien todos estamos mejor con alguien que nos levanta el ánimo, definitivamente hay otras cosas que podemos hacer para mantener nuestra integridad intacta y que el sexo sea una parte positiva de nuestras vidas en lugar de un destructor.

  1. Responsabilidad – Todo hombre necesita otros hombres en su vida que le hagan las preguntas difíciles sobre su vida sexual. La responsabilidad no es solo para las personas en Alcohólicos Anónimos; todos la necesitamos. Es mucho más fácil comenzar el camino hacia la infidelidad y el escándalo cuando estamos solos para justificar cada pequeña falta de integridad sin el foco de atención de la responsabilidad.2.
  2. Ten un gran sexo con tu esposa – La idea de que la mejor defensa es un buen ataque también se aplica a tu vida sexual. Un hombre que tiene relaciones sexuales maravillosas con su esposa es mucho menos propenso a buscarlo en otra parte3.
  3. Ni siquiera camines por su calle – No des un solo paso por el camino hacia la infidelidad. No vayas a almuerzos “amistosos” con tu secretaria; no te quedes tarde en el trabajo charlando con una compañera; no intercambies correos electrónicos y mensajes con la amiga de tu esposa.4.
  4. Aprende algo emocionante – Si el sexo es lo único que te emociona como hombre, necesitas encontrar nuevos pasatiempos.

Si el sexo es lo único que te emociona como hombre, entonces necesitas encontrar nuevos pasatiempos. Aprende una nueva actividad, como volar un avión, obtener tu certificación de buceo o escalar rocas. A menudo nos sentimos más realizados cuando estamos en el proceso de aprender algo nuevo, y esta realización es una excelente manera de llenar el vacío que de otro modo podría satisfacerse con una nueva mujer.

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